By “Conoce tu pasado,
entiende tu presente
y sobrevivirás al futuro”
Gina Marcela Vázquez
Lic en Educación artística.
A comienzos de este año y viendo la necesidad de realizar un acompañamiento educativo a su hijo, Gina Vázquez tuvo la idea de generar un espacio donde no solo el pequeño Martín desarrollara sus habilidades, sino que pudiera compartir con más niños y niñas del barrio que tuvieran el deseo de adquirir conocimientos en arte y cultura. Así nació la Academia Artística Mostaza, ubicado en el barrio Compartir, en Soacha , se ha convertido en un lugar de reunión y pequeña tertulia donde los niños, niñas y hasta los jóvenes son felices aprendiendo y, sobre todo, obteniendo grandes enseñanzas de vida.
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Mostaza debe su nombre en parte a la parábola proverbial en la que una pequeña y sencilla semilla de mostaza se convierte en un extraordinario árbol. Esto no quiere decir que se trate de influir en las creencias religiosas de cada niño ni en la de sus familias; solamente es el reflejo de lo que se puede lograr en el ser humano a partir de inculcar valores combinándolos con expresiones artísticas como el origami, globoflexia, modelado en plastilina, la música y la danza.
“Es un granito de arena con la esperanza de que se extienda” Gina Vázquez, Directora de Mostaza.
Con una amplia formación y recorrido en proyectos relacionados con la educación artística, esta licenciada soachuna ha trabajado en proyectos y actividades en Colombia y Argentina. Ahora se prepara para viajar en los próximos días a los Estados Unidos, donde dictará algunos talleres a niños norteamericanos y podrá efectuar un ejercicio interactivo con los miembros de Mostaza, según lo presupuestado.
Mostaza es construcción de ciudadanía
Algo para resaltar de Mostaza, es que gracias a lo aprendido, sus miembros han logrado vincularse a ejercicios constructores de ciudadanía, como por ejemplo trabajando de la mano con organizaciones culturales como Circorotos, o personajes representativos del arte en Soacha como el ilustrador Gusanillo de Tierra (Del cuál profundizaremos en una próxima ocasión), formando una red de organizaciones sociales que trabajan en el PET (Plan Estratégico Territorial) de la Comuna 1 de este municipio cundinamarqués.
Es una academia artística que fomenta en los niños el deseo de expresarse a través de la literatura, el reconocimiento del esquema corporal, la motricidad fina, la motricidad gruesa y no menos importante: El lenguaje espiritual y la interpretación de sí mismo, como lo define su directora.
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Stones con sabor ancestral
Uno de los ejercicios más llamativos de Mostaza y proyecto ganador del estímulo Suarte 2021, es Stones con Sabor Ancestral, que consiste en tomar utensilios reciclables y de uso común como por ejemplo canecas, baldes, botellas, entre otros, para realizar instrumentos musicales propios de los muiscas, de los cuales se pretende rescatar su legado para que siga siendo salvaguardado por las próximas generaciones.
Son 13 clases donde los niños participantes aprenden a crear el instrumento a partir de utensilios cotidianos, para ello se utiliza la técnica de stencil (estarcido), intervenir el instrumento marcándolo con grafía muisca, interpretación de una canción muisca tomando como base únicamente la partitura, ya que no hay registros de la misma en plataformas digitales o formatos físicos de grabación. Para ello un “taita” partituró la canción para que sea emulada por los niños,
«Los chicos escriben su nombre y edad con la escritura muisca, identifican qué significa el Dios Varón del Sol que es tan representativo para nuestro municipio” Gina Vázquez, directora de Mostaza.
Aprendizaje con valores humanos
Los niños aquí son quienes tiene el papel preponderante porque reciben la enseñanza que profesionales en diversas áreas están dispuestos a brindar sin obtener nada a cambio más que la satisfacción de construir un lugar mejor para convivir.
Para esta labor se cuenta con el apoyo de la trabajadora social Natalia Salgado, quién realiza la investigación socio económica y socio cultural para luego tabular los resultados y por qué no, replicarlos a futuro en otras comunidades del municipio. También se cuenta con el apoyo del realizador audiovisual David Higuera, quién construye el registro de cada actividad, evidenciando los avances y pormenores de la evolución artística y humana de los niños. Además de docentes en música y otras áreas artísticas.
“Me gusta mucho la música, aunque a veces dudo si soy buena o no, pero estoy en la clase de Mostaza para aprender y ser mejor en lo que hago” Dina Araque
Para Samuel Ortiz es uno de los niños asistentes a los espacios “Me gusta mucho como hacen las cosas, he aprendido bastante a dibujar y en mi casa ya tengo bastantes dibujos”
Sin duda que la Academia Artística Mostaza surge como una novedosa iniciativa que rescata la ancestralidad desde ejercicios lúdicos y propositivos, enhorabuena por su labor y el ejemplo que brinda a la niñez y juventud soachuna.
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