By Por: Mónica Andrea Rodríguez Ospina– Lic. Humanidades y Lengua Castellana- Magíster Creación Literaria
El ser humano está condicionado desde su concepción a pensar, buscar en el realismo lo sublime, llevarlo a un conjunto de metáforas que representan la esencia del hombre, en el sentido global de la palabra, porque toda forma de arte es el símbolo de los dones impresos en cada uno de nosotros. No obstante, precisamente depende del propósito de vida, estancar esos dones o implementarlos al servicio de los demás y para el más alto bien personal. En una época bombardeada por la tecnología, pensar es un delito y es un delito aún más grave crear a partir de la innovación, en ese medio hostil sobreviven los artistas. Olvidamos que el arte es la manifestación primaria del legado histórico y la base de toda forma cultural. Por naturaleza, necesitamos interpretar el medio que nos rodea con la secuela propia de la percepción, el descubrimiento y la experiencia vital.
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En medio de ese retrato, se rompe el paradigma del artista frustrado y se revela que se puede vivir plenamente de la pasión grabada en la sangre, que todos somos libres de decidir llevar nuestros sueños a su máximo esplendor o fracaso. Prueba de ello, es Luisa María Velasco Escalante, una mujer que ha dedicado su vida al arte, que nos demuestra la importancia de la perseverancia y que no basta únicamente el talento para conseguir un objetivo, que se requiere de voluntad, disciplina y una intención firme para llegar al éxito. Luisa es una artista con más de veinte años de experiencia; sorprendentemente, empezó a la de siete años, cuando su ideal era ayudar a sus compañeros de colegio con las dificultades propias de las tareas que requieren creatividad y motricidad fina. A los dieciséis años comprendió lo que muy pocos comprenden a esa edad, cambiando su destino – ¿Es posible vivir de lo que nos apasiona?, – ¿Es posible vivir de nuestros talentos? – ¿Es posible vivir del arte, en un país donde el arte es deplorado? La respuesta es “sí”. Es la búsqueda de la hibridación entre crear e innovar con emprender en una marca personal, única en un medio competitivo.
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Ella nos enseña a valorar nuestros dones y que en definitiva el talento requiere de la suma de la oportunidad con la preparación. Por ello, Luisa además de ser una excelente artista plástica, es Administradora de Empresas. Su arte consiste en la elaboración de piezas elaboradas de alto diseño sumamente realistas y con impacto ambiental. A sus escasos veintisiete años, su trabajo es aclamado a nivel nacional y próximamente a nivel internacional. Entre sus reconocimientos se destaca: Mejor Trabajo de Grado en UNIMINUTO 2019, fue nominada a Premios Portafolio en la Categoría Mejor Estudiante Universitaria 2019, becada por el convenio de Movilidad Internacional MACA para cursar un semestre universitario en Argentina 2018. Es una de las Ganadoras de Generación CEIS-Programa de Incubación de emprendimiento de la Universidad de la Sabana 2021 y recibió el Galardón Padre Diego Jaramillo Cuartas 2022.
Realmente, Luisa Velasco es un orgullo municipal, una de las artistas más importantes y emprendedoras del municipio, una artista visionaria que rompe los esquemas y paradigmas negativos del “Vivir” del arte.
Todo es posible si desea y se trabaja con constancia en ello. Como siempre, los invito a seguir el trabajo de nuestra artista a través de sus redes sociales, les aseguro que quedarán atrapados en la simetría perfecta de su creación.
Fotos: Comunicaciones Luisa Velasco
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